19.3.07

Cuidado...Perro Bravo

Uno de los siete pecados capitales, es la IRA, descrita por Dante como "amor por la justicia pervertido a venganza y resentimiento".

La ira convive, generalmente, con un sentimiento de impotencia y con los deseos de venganza. Es un sentimiento de odio incontrolable, cuyo origen, muchas veces, es infundado.

Muchos son los casos que pueden despertar al monstruo dormido que llevamos por dentro. Pueden ser detalles sin importancia, o hechos agravantes en toda la extensión de la palabra. El caso es que una vez que el pequeño gigante despierta, es muy difícil volverlo a apaciguar. Te carcome por dentro, da mil y un vueltas por tu cabeza agarrado de la mano de ideas antisociales que podrías poner en práctica sin que te quedara ni un mínimo de remordimiento de conciencia. Porque en estos casos, la conciencia y la razón no tienen ni voz ni voto.

Estoy iracunda…por qué? ni yo misma lo sé con exactitud… por la demora de algunas cosas, por la rapidez de otras, por tener que vivir en una ciudad plagada de “amigos de lo ajeno” (perfecta descripción, Muvimeiquer), por estar rodeada de gente egocéntrica, de gente que aparece y desaparece como por arte de magia, de los que no te entienden, de los que te entienden pero no le importa, de los parásitos, de la basura que vive en esta urbe y que se reproduce peor que un virus… en fin.

Me molesta sobremanera tener que pelear con mi mostrico interno, porque me deja agotada, porque tengo que dar explicaciones a quienes me rodean del por qué de mi humor cambiante.

Simplemente estoy padeciendo de uno de los siete pecados capitales.


La niña del bigote

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